GALERIA DEL TERROR, CAPITULO XVIII: QUE VA A SER PEDRITO...YA ES CASI DON PEDRO.

Gambeteando la tristeza va quebrando la cintura, no sabe de cerraduras que encierren el sentimiento. Con pasión y con locura va dejando en el cemento su huella firme de sueño hambriento.

Así va el pibe sencillo a la sombra del castillo, construido de arrabales, pintado de carnavales donde Momo se relame en banquetes de alegría, Don Pedro le da la copa, pa' que embriague su alma herida.

Así es, así conmueve, cuando sale en su danza, deja todo en la matanza.

Demencial su cuerpo vibra, florece salto y patada, con sus ansias de volar, recortando madrugadas.

Uno de los que se traen el futuro de Cachengue bajo el brazo. Pero con un gran presente. Un pibe que se las trae, sensible como pocos, cabrón como pocos....bah, no como pocos no...en la murga hay un montón.

Pedrito, Popito, Pey, "p"etcétera... Muchacho, estudiante y trabajador, digno para una suegra mas que para una novia. Pasó sus últimos años de niñez y transita los últimos de su adolescencia (la convencional dada por los expertos, porque ahora viene la adolescencia eterna de arpillera).

Lo vemos en plena acción en el espectáculo 2007 con su sonrisa que denota que siempre tiene algo entre manos aunque no lo dice. Saltando en el cumpleaños del Chino de Alquimia. La pucha que vale la pena estar...en el piso, da vértigo el muchacho. Piernas y cadera que se quiebran y se vuelven a quebrar, convirtiéndose así en uno de los pilares de la danza cachenguera. Es que la gente va envejeciendo y engordando ¿vio?, y le deja paso a las juventudes. (Nde la R: igual no aflojes Maxi)

Pedro, integrante de la familia hobbit, anda por los lares de la Plaza24 inseparable de Ramiro, Emi, las pibas y por supuesto, con marca personal de "Ña" Julieta. Amorcito del cole...tiernitos como pocos...arrancan un dulce aaaaaaaaaaahhhhhhhhhhh (con suspiro y cierta musicalidad maternal).

Abajo disfrutamos un poco menos de la imagen de este personaje, puesto que está demasiado cerca y asusta, pero es lo que hay. Con cara de que linda es esta vida, recién maquillado y esperando algún inicio de presentación de la murga. En la otra foto lo vemos con los lentes que nos desdibujan la realidad, esos que los vendedores de ilusiones nos quieren dar todos los días. Claro que Pey no los acepta pa' nada...
Pedro, este pibe de Ortuzar, es puro corazón, lo da, lo deja, en cada paso y en cada presencia. Un tipo de esos que da gusto conocer, abierto a aprender lo que la vida le va dando para crecer y por sobre todas las cosas, un chabón que se le brindaría la confianza para cualquier cosa, (salvo el diseño de la pagina de internet de la murga).
De chiquilin ya miraba de adentro al Mundo de Momo. Hasta hay una foto memorable, de cuando tenia 5 añitos, vestido de candombero perdida por algún lado. Fanático de Boca, hasta casi la enfermedad.
La verdad no se puede decir mucho mas, ya que cualquier cosa que digamos se queda corta...Los invitamos a conocerlo.